El conflicto entre Palestina e Israel

Palestina e Israel llevan más de medio siglo en guerra permanente, y con un fin común: tener la posesión del territorio palestino, cuya provincia más importante es Gaza.
El origen de estos hechos tiene lugar en 1918, cuando Alemania -que se adueñaba del imperio turco-otomano, es decir, de la región palestina, entre otras- pierde la guerra. Como consecuencia esta región pasa a manos de los que salen victoriosos, Inglaterra y Francia, que son considerados por expertos en la materia en gran parte principales culpables de este conflicto. Al referirnos a región palestina, se comprende que es tanto la región del este del río Jordán como la región del oeste.  Lo que se conoce como Palestina, es territorio que siempre ha querido ser formado por los nacionalistas musulmanes, entre ellos muchos radicales que forman parte del terrorismo actual. Por otra parte, el territorio israelí es aquel constituida por los seguidores del Torá.
En un principio todo el territorio era dominado por los musulmanes radicales, si bien, en una guerra árabe-israelí en 1948, los judíos se adueñan de gran parte del territorio palestino, comenzando aquí materialmente el conflicto. Este conflicto se agrava con la retirada de Gran Bretaña, que se veía incapaz de contener a los dos bandos.
A partir de esta guerra se producen distintas oleadas contra los israelíes a lo largo del siglo XX por estados que apoyaban mayoritariamente la religión musulmán, como es el caso de Egipto -que acaba firmando la paz con Israel- y Cisjordanía, entre otros. Finalmente la región musulmán, que ocupaba casi todo el territorio, queda reducida a una pequeña porción el este de lo que es ahora Israel, y es separada de este estado por lo que se conoce como la franja de Gaza. Actualmente los israelíes son los que protagonizan diferentes levantamientos en esta porción del territorio en aras de invadirlo.
En conclusión, son los estados occidentales que conformaron las dos guerras mundiales en el siglo XX los culpables de estos conflictos sucesivos que dejan muertos día sí y día también y que aún se siguen dando y por tanto, los que deberían luchar por establecer la paz para estos territorios de alguna forma.